LA PRÁCTICA DE LA APNEA COMO UNA COMPETENCIA

 

No deja de  seguir inquietándome el creciente interés de realizar apneas como una  competencia deportiva.

Hace  algún tiempo  se realizó en Cali  un torneo en las modalidades de: apnea estática, con desplazamiento, y  por relevos, en fin  apnea competitiva para todos los gustos, congregando un importante número de personas principalmente jóvenes, bien como practicantes o como espectadores.

Los que asistieron a este evento recordarán muy bien como las personas  conocedoras y supuestamente  entrenadas en tan delicado tema, terminaban su  participación  a punto de perder el conocimiento, sin  posibilidades  de salir  por sus propios medios  de la piscina.

Esto seguramente puede verse como normal para  quienes están apostándole al reto  de vencer el  último esfuerzo en estado de conciencia.

Si en el tema del  salvamento acuático no dejo de preguntarme cuántos ahogados se requieren para que una piscina  disponga de un salvavidas?. En este caso en particular me hago la misma pregunta  ¿cuántos muertos se necesitan considerar que la apnea  no deba ser promovida como una competencia deportiva?

Será que una actividad donde  está en juego la salud y vida de las personas  se considera deporte, y debe ser patrocinada por el estado y financiada  con los dineros de nuestros impuestos?

Seguramente los muertos  por causa de la apnea no los ponen estos torneos donde se supone que todas los riesgos están minimizados y controlados, pero ya hemos venido enterrando a los que  Pre y Pos a un torneo  o por el simple hecho de  mejorar sus propios registros realizaron su última apnea solos.

El procurar control mental, manejo de la capacidad respiratoria, practicar yoga, relajación mental etc, etc, para lograr que la mente gobierne y regule  las necesidades de nuestro normal metabolismo, indefectiblemente  lleva  a estos personajes a  buscar aislarse de todo y de todos, hasta que cometen el error de su vida, realizan también sus  inmersiones solos.

Los Instructores Internaciones Jorge Ramírez, y René Cardona, atletas, profesionales, conocedores del tema como los mejores, qué los llevó a realizar  la última apnea de su vida solos? Qué pasó con la esposa del campeón del mundo?

Ahora una competencia  deportiva donde lo que aprendemos es a  romper los límites del  normal funcionamiento del organismo  al dejar de respirar por largos períodos  en un medio  ochocientas veces mas denso que el aire, no estoy seguro que deba ser fomentada  como un deporte, actividad esta que  fundamentalmente procura la salud y el bienestar.

Las actividades  subacuáticas tienen una  inmensa gama de modalidades competitivas mas  razonablemente sanas y seguras que deberían ocupar toda nuestra atención,  empeño y recursos  en procura de  que el esparcimiento y uso del tiempo libre  viajen en armonía con la salud y la vida.

 

 GONZALO CONCHA