BARRACUDAS 30 AÑOS - OCTUBRE 16 /1975 –2005

 

No me lo hubiera perdonado el haber pasado inadvertido el  día de hoy 16 de Octubre, sin compartir con todos ustedes los amigos de la mar, estos 30 años del Club Deportivo Barracudas Del Valle, Institución que le abrió las puertas a una nueva actividad deportiva competitiva y recreativa en Colombia, cambiando en muchos de nosotros para siempre nuestras vidas.

 

Hoy 16 de Octubre de 1975 hace ya 30 largos años, en compañía de un grupo de soñadores, para unos;  aventureros, para otros; y de visionarios, para muy pocos; decidimos hacer la diferencia, organizándonos dentro de las normas legales de Coldeportes para impulsar una nueva actividad deportiva, que si bien ya contaba con alguna trayectoria en nuestro país no estaba al alcance de la gran mayoría de conciudadanos.

 

Gran reto nos habíamos planteado, puesto que sin poder seguir la huella de otros aquanautas locales debimos empezar con una buen dosis de imaginación, mucha mística, y la mirada bien puesta en aquellas latitudes donde  ya se venía practicando esta actividad de manera masiva, placentera y segura.

 

Valga la efemérides para hacer  un homenaje póstumo a Hernán Henao Jaramillo, paisa este, quien fuera fundamental con su experiencia adquirida en el Club Británico en la formación de buceadores, y de paso  contarles  a quienes llegaron un poco mas tarde, que el nombre de Barracudas, nombre pegajoso que nos infundió un profundo sentido de pertenencia a esta nueva manera del ver la mar y en general el mundo sumergido y la vida misma, se debió a una aterradora experiencia vista desde la lente del Médico Hernán Henao Jaramillo, (q.p.d.) quien petrificado en un buceo en el Horno de Gorgona, no salía de su asombro cuando un cardumen de hambrientas barracudas en medio de aguas teñidas de verde y salpicadas con trozos de carne, me arrebataron por entre mis brazos, en fracción de segundos, un gran bravo mal arponeado, al que  simplemente pretendía  retirarle la varilla.

 

Agonizaban los años sesentas, épocas de mi calentura por el buceo pero sin mayor formación, ignorancia esta que me permitió pasar este trance absolutamente ajeno a lo que pudo haber sucedido en este frenesí alimenticio de las barracudas, razón por la cual quedé muy impresionado cuando fui enterado de mi delicado e irresponsable acto, razón por la cual dejamos este impronta en el Club que posteriormente fundaríamos. Hoy  cuando muchas mareas han visitado a Gorgona, sigo pensando que los animales del mar como las barracudas entre otros, definitivamente no tienen a los seres humanos contemplados en su cadena alimenticia.

 

Finalizando los años setentas Barracudas en nuestro medio era  entendido como un sinónimo de buceo, igualmente se convirtió en la mira de nuevos Clubes, los que fueron brotando por todo el territorio nacional, como semilla esparcida en campos bien abonados, y así, en un ambiente de camaradería y fraternidad Colombia maduró para que bajo liderazgo e iniciativa del Club Barracudas se formalizara la actividad a nivel nacional al fundar una nueva Federación Deportiva.

 

Hoy treinta años después como fundador solo me embarga  un profundo sentimiento de gratitud para con todos los que me acompañaron y respaldaron de una u otra forma, bien como autoridades deportivas, practicantes, directivos, instructores, y comunidad en general, dando de sí sus mejores talentos para que hoy esta actividad haya logrado su clímax, al estar alcance  toda las familias colombianas, permitiéndoles una nueva alternativa de recreación, así como una adecuada utilización del tiempo libre en dentro de parámetros seguros y placenteros.

 

Finalmente no puedo olvidar en esta fecha a quienes hoy ya no están entre nosotros y que nos acompañaron en algún trecho del camino durante estos treinta años, para todos ellos: Mil gracias y que el Dios de las profundidades los tenga en su reino descansando en paz.

 

Gonzalo Concha.

16/10/2005